Cuando nos pasan situaciones incómodas y muy dolorosas, especialmente personales y demasiado emocionales, es muy fácil sentir que el mundo se desmorona en nuestro interior. En las relaciones sentimentales esto es aún más fuerte.
Recientemente estuve pasando por algo que en verdad me causó mucho dolor, tristeza, desasosiego; incluso me sentí traicionada, burlada, con poca valía. No tengo necesidad de culpar a nadie porque en primera instancia, todo parte de una decisión personal que creí sería una muy buena, pero al final no me llevó a nada. Soy humana, no lo sé todo y sólo quise probar algo diferente con alguien, pensando que podía tomar un rumbo distinto pero no fue así.
En medio de ese dolor que todavía siento, pude dar gracias a Dios, al universo, como tú le quieras llamar, porque solo por mandar un mensaje de texto pude saber qué era lo que en realidad estaba pasando. Solo eso fue suficiente para tener la información necesaria para tomar con firmeza la decisión de recorrer un camino distinto y alejarme de lo que no me estaba funcionando. Fue demasiado fácil como todo eso llegó a mi y por eso sé que estoy siendo guiada por una inteligencia superior.
No tuve que pensarlo mucho para saber que estaba siendo protegida por Dios, la inteligencia suprema, el padre azul, el universo. Sólo lo supe, es algo que se siente en el interior. A pesar de sentirme tan dolida, lo entendí y decidí actuar en concordancia.
Me parece que estas son las 5 formas como el universo me mostró qué tenía que hacer en éste caso, y cómo fue que lo hizo, porque hay tantas cosas de las que puede valerse. Todo lo que existe en nuestra realidad le es muy útil para comunicarse con nosotros. Si funciona así para mí, tal vez pueda funcionarte a ti también si estas atravesando por una situación dolorosa.
1. La revelación
En mi caso, sucedieron cosas inesperadas que sacaron a la luz lo que necesitaba saber. Solo con decir "me encuentro cerca de tu casa", la otra persona reveló información sin yo pedirla directamente. Yo no dije "voy a tu casa", sin embargo, se reveló lo que estaba haciendo y por ende, yo no debía llegar allá, lo cual no era mi intención. Esta declaración, aunque dolorosa, fue una forma de hacerme ver cómo todo salía a la luz. La verdad sólo se reveló sin tanto esfuerzo de mi parte.
2. La intuición
Por lo general, estoy conectada con esa voz interior que me dice cosas. Me estaba hablando y solo la escuché y actué. Nuestro mundo interior nos manda pequeñas señales en forma de pálpito, corazonada o que algo se siente raro. Conviene escuchar con atención para evitar daños. Mi deseo de decirle que estaba cerca de su casa fue esa señal, lo que me llevó a escribirle y ver como la verdad solo encontraba su camino; esa fue la manifestación de mi intuición. De eso no tengo dudas.
3. El desconcierto emocional
Todo ese dolor, tristeza, nostalgia, todo todo, son emociones muy bajas y negativas que no nos gusta experimentar, pero tienen un objetivo claro: mostrarnos que no estamos alineados con lo que en verdad nos lleva al bienestar sin pisotear nuestros propios valores. Las emociones son fuertes y nos hacen reflexionar, identificar lo que no esta funcionando para cambiar y mejorar, para protegernos. El universo se apoya en estas emociones para que busquemos lo que si nos hace bien. Detrás de ese dolor, se viene un cambio importante. Se toman decisiones que nos llevan a lograr la seguridad, la confianza y el respeto que queremos recibir.
4. Puertas que se cierran
Los cierres inesperados pueden generar mucho más dolor del que ya estamos experimentando. A pesar de sentirme así de herida, entendí que este cierre es necesario para que se abra otra puerta. A veces el universo hace estas cosas para protegernos de algo mucho peor. Yo sé que si permanezco en ese camino, no puedo enfocarme en atraer a mi vida mejores oportunidades, de esas que si son satisfactorias y transparentes. No es nada fácil ver como se cierra esa puerta de forma inesperada y confusa, pero si lo pensamos bien, así es como podemos redireccionar nuestro camino hacia el desarrollo personal, hacia lo que nos conviene de verdad. Desde esta perspectiva, el cierre es una gran bendición.
5. Claridad sobre tus necesidades
Todo cobra sentido en medio del gran desafío que se presenta. Con tristeza, dolor, nostalgia, supe, de forma repentina, que era lo que debía hacer. Mis necesidades estaban claras a pesar de todo. A partir de los hechos supe determinar qué es lo que es lo deseo en una relación y lo que no. El pensar se vuelve intenso pero necesario para poder saber qué estoy dispuesta a hacer por mi propio beneficio, mi propia satisfacción. Tengo claridad acerca de mis propios sentimientos y valores, y lo que no estoy dispuesta a tolerar. Esto es protección.
Otra cosa que noté es que sentir todo este sufrimiento no es debilidad. Es una muestra de que si quiero cosas bonitas, sentir amor, paz, tranquilidad con alguien. Soy capaz de crear lazos significativos y no quiero migajas.
Estas experiencias por duro que parezcas, traen escondida una oportunidad para crecer, para aprender a elegir, a poner límites, establecer que tipo de conexiones se desean. Siempre hay aprendizaje en todo lo que se vive.
Estoy segura que el Universo tiene todo que ver con esto. Tal vez encuentres alivio al identificar algo que te indique que estas siendo guiado y protegido. Los más probable es que al terminar de leer esto, tengas un momento de iluminación para redefinir el rumbo de tu vida.