El orden de los factores si altera el producto
Hace muchísimo tiempo, cuando navegaba por las redes sociales viendo cosas al azar, me encontré con un hombre que hablaba de tres palabras poderosas que debemos aprender a usar para que nuestra comunicación sea asertiva, positiva y genere un mejor impacto en nuestros receptores.
Solo recuerdo una de las tres palabras, y es supremamente importante porque la usamos a diario, muchas veces al día y le hemos aportado un significado negativo que hace que todo lo demás se pierda con facilidad. Es la palabra "pero".
Claro que la conoces. La usas constantemente y de forma automática, por lo que la configuración que le diste obedece al ambiente donde creciste, la forma como las demás personas la dicen y el significado que le imprimen. Eso te programó, sin quererlo, para usarla igual que los ellos.
Normalmente la usas para unir dos frases. La primera siendo una muy positiva y la que sigue siendo muy negativa, ¿Es correcto? Bueno, así fue como lo aprendimos en el colegio, en la casa, en la calle, en el trabajo, en todos lados. Siempre que escuchas la palabra "pero" te prepares instantáneamente para escuchar algo malo. Ya lo sabes, así fue como te entrenaron.
Siempre que escuchas algo muy bueno, en cualquier lado, haces una imagen mental que corresponde a lo que te están diciendo. En el momento justo que esa persona dice "pero", tu muy agrandada y positiva visión se convierte en un canvas negro, sin vida. En cuestión de segundos, esa sola palabra remueve toda la diversión del momento (No voy a escribir ejemplos porque sé que ahora mismo estás pensando en eso. Confío en tu inteligencia).
Para la mayoría de las personas, escuchar un "pero" es sinónimo de pérdida, desilusión, algo malo. Es el significado que le otorgaron otras personas antes de ti y así lo aprendiste. Pero (jajaja ahí está) no tiene porque ser así. !Puedes hacer algo mejor!
Vamos a cambiar eso ahora mismo. La propuesta es solo invertir el orden de las frases cuando vayas a usar ese conector lingüístico tan temido por casi todos a tu alrededor; Primero di algo que en apariencia es un poco negativo, y después del conector "pero" usas la frase positiva que corresponda con el mensaje que quieres mandar.
Por ejemplo:
¿Notas la diferencia? tienes que empezar a practicar en tu mente todos los días, de la misma forma como hacías las planas en el colegio para aprenderte algo, o como cuando te encerrabas en el cuarto para aprenderte tu parte de la exposición sobre el sistema solar.
Esto lo debe monitorear primero, debes pensar antes de hablar. Al principio parecerá robótico y poco natural, pero luego, cuando lo lleves de forma inconsciente, será todo un proceso automático.
Al invertir el orden de las frases, inviertes la intención. Ya no vas a generar una reacción negativa, sólo algo muy bueno y beneficioso. Un simple cambio altera todo el propósito y el significado de la palabra "pero" para futuras interacciones.
Date cuenta que la palabra en sí misma no es negativa. Todo depende del significado que le atribuyes y la forma cómo la usas.
Empieza hoy mismo a darle un mejor uso a esa palabra, paso a paso, de forma consistente. Esto genera otro tipo de dinámica mental que luego, te llevará a repensar todo tu vocabulario, y eso, eso es fabuloso. Estamos aquí para mejorar.